"Buena suerte" - Nickolas Butler

 

El día que en la pequeña constructora propiedad de Bart, Teddy y Cole se recibe una llamada para encargarles la finalización de la construcción de una casa en plenas praderas de Wyoming, se abre para ellos un futuro alentador y lleno de oportunidades. Sin embargo, el contrato tiene una condición a cumplir: terminar la obra en apenas tres meses, justo para el día de Navidad. Su propietaria es firme en la propuesta, pero la promesa de pago de una prima, además de lo económicamente jugoso del contrato, hace que los tres socios y amigos se lancen  a llevar a cabo un encargo tan apretado en el tiempo. ¿Conseguirán cumplir los plazos? ¿Qué se esconde detrás se semejante oferta? 

Sobre estas premisas, Nickolas Butler construye esta novela en la que juega con dos tramas paralelas. Por un lado, el trabajo de los tres socios en la construcción de la casa y la lucha contra el calendario para cumplir el plazo de entrega, nos muestran cómo responde cada uno de ellos a esta presión. Sus capacidades, debilidades e intereses reaccionan de diferente manera en un proyecto que les exige trabajo, trabajo y más trabajo, en un lugar alejado de sus casas y con la vista puesta en una climatología que cada vez ofrece más obstáculos. Su entorno social y familiar forma parte de esa carrera contra el tiempo y provoca en los tres amigos reacciones diferentes, creando situaciones, en ocasiones, al límite, y complicando la terminación del proyecto de construcción. Por otro lado, se presenta el suspense que rodea a la mujer que ha realizado el encargo y la razón que rodea la decisión de plantear un plazo tan inmovible y, por otro lado, tan jugoso en cuanto a su cumplimiento. Ese trasfondo que rodea a tan enigmática mujer, esconde una intrahistoria tan jugosa como primordial para el transcurrir de la novela.

Estamos ante una novela fantástica en cuanto a su trama, por el suspense que destila de principio a fin, como por el trabajo de profundización en la personalidad de los protagonistas. Las dos tramas que se cruzan a lo largo de la novela, nos desgranan todo lo oculto que vamos descubriendo mientras escarbamos página a página, en el transcurrir de los personajes ante sus retos, sueños y apuestas de futuro. A veces los intereses buscados y la oportunidad de alcanzar un sueño, chocan con la realidad que la vida les plantea día a día, con todas las dificultades y barreras que esto conlleva. Eso es con lo que tienen que lidiar los protagonistas de esta novela, la posibilidad de ver truncados sus sueños y descubrir que a veces la vida les propone una serie de trabas para continuar con su camino, alguna de las cuales depende de su propia voluntad, mientras otras, a pesar de los pesares, son inevitables.

Buena suerte resulta ser una buena novela de personajes, profundamente humana y con un tanto de suspense que aporta interés a sus páginas. Se lee con gusto y adicción hasta terminar sus últimas páginas. Una gozada de lectura de un autor al que seguiré de cerca.