Este fin de semana se ha escenificado en la actual temporada de Baluarte de Pamplona, "Pluto" de Aristófanes. La directora Magüi Mira, ha planteado una versión, formalmente fiel al teatro griego, tanto en vestuario como en la presentación de los personajes. Por otro lado, el texto original, basado en la crítica social a la riqueza y la desigüaldad, está perfectamente entroncado con una actualidad, desgraciadamante paralela al guión original. En el escenario, minimalista sino fuera por cinco bancos y una gran alfombra central donde actúan los actores, se sitúa un pianista, que acompañará en los diferentes números musicales que se dan durante la obra. Porque efectivamente, no solo de texto se nutre la actuación, sino que una serie de canciones que completan la comedia. Y ello, no es por otra razón, que por la interpretación del cantante Javier Gurruchaga.
El lider de la famosa "Orquesta Mondragón", encarna a "Pluto", el dios de la riqueza, que ciego, no sabe ha quién otorgar sus dones, para beneficio de ricos aprovechados. Un agricultor arruinado, Crémilo, interpretado, en mi opinión,por el mejor de la noche, Marcial Alvarez, decide devolverle la vista y hacer justicia con un reparto igualitario y honesto de la riqueza. Al tiempo los que eran desgraciados, hacen su sueño realidad, frente a los que antes se aprovechaban, y ahora ven reducir sus bienes y dones, a pesar del interés de la diosa de la pobreza, también interpretada por Gurruchaga, por intentar convencernos de la necesidad de la pobreza en el mundo.
Esta obra esta llena de gestos, sátiras y guiños cómicos, que hacen referencia a la crueldad de la desigualdad y una fuerte crítica a los abusos de poder, frente a las desgracias de los más débiles. Una hora y media repleta de chistes y canciones, en algunos momentos acompañados de escenas casi surrealistas, en las que el sexo protagoniza momentos de cierta paranoia escénica.
Las risas no dejaron de acompañar la obra, a la vez que sin duda, hacía pensar sobre la realidad paralela que vivimos en la actualidad, con las noticias relativas a corrupción, beneficios y abusos de ciertas élites de la sociedad. Respecto a las canciones, otorgan cierta variedad a la obra, pero no llaman la atención ni por su calidad ni por sus interpretaciones, ni siquiera en la figura de Javier Gurruchaga que, con cierto buen hacer, no puede evitar su caricaturesca personalidad de tiempos de la "Orquesta Mondragón". Respecto a los demás intérpretes, como ya he dicho, Marcial Alvarez realiza una solvente y robusta interpretación, acompañado de otros actores y actrices de actualidad televisiva, como Marisol Ayuso, Jorge Roelas, Ana Labordeta, Juan Meseguer, Sergio Otegui, Toni Misó y Cayetano Fernández. En este caso, la interpretación del coro acompañante fue protagonizada por los mismos actores, escondidos por unas clásicas y efectivas máscaras griegas.
En fin, que la hora y media de actuación, resultó entretenida, a veces algo vulgar, pero sobre todo, nos demostró que a pesar de los milenios, hay gente que se aprovechará del dios de la riqueza para beneficio propio, sean cuales sean los medios para conseguirlo.
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