Un ex-agente de la multinacional Lincon´s Eye, emprende la caza de quienes la dirigen. Las razones de ello todavía se encuentran entre tinieblas. La cuestión es que sus objetivos saben que tarde o temprano terminarán cayendo bajo el punto de mira de quien protagoniza este espectacular cómic guionizado por Peter Milligan y dibujado por un sorprendente y brillante dibujante llamado Aco. Si bien pudiera parecer que nos encontramos ante un thriller manido en cuanto a su argumento, Milligan da un giro de tuerca mostrando al lector como el ronin protagonista es un ser que mediante la inoculación del ADN de su víctima potencial, es capaz de conocer el pensamiento, las debilidades y pesadillas de quien es su objetivo.
Su capacidad para meterse en su mente le convierte en un asesino perfecto, no solo por su conocimiento de su presa, sino por las infinitas posibilidades que se le presentan para acabar con él, incluso a distancia. El problema es que éste instrumento letal, ahora se ha convertido en el cazador de quienes lo entrenaron y utilizaron para sus propios fines, dando pie a una carrera por acabar con el protagonista antes de ser cazado y, para ello, qué mejor que utilizar un arma similar que pueda contrarrestar las ventajas del que se mueve por motivos de una venganza, todavía desconocida para el lector.
Milligan nos lleva de viaje por un submundo cerebral en el que las pesadillas y los miedos más recónditos de las personas sirven de referencia para encontrar sus debilidades y puntos flacos. La cuestión es ver hasta qué límites insospechados se puede llegar en este método de manipulación y asesinato, y sobre todo, qué sucedería en un enfrentamiento con quien goza de las mismas habilidades. Es aquí donde el más mínimo detalle marca las diferencias en una carrera de destrucción, venganza y supervivencia.
No debemos olvidar la importante, importantísima aportación del dibujante español apodado Aco, quien construye un multi universo versátil, espectacular y convincente en cuanto a lo que sucede en las mentes de los protagonistas de este cómic, mientras es más de capaz de construir una ambientación urbana muy convincente y unas páginas espectaculares en cuanto a la acción desarrollada, que no es poca, además de una distribución de las viñetas y escenas que plagan de gran interés un tomo que se alimenta de cinco grapas y que tendrá continuación. Tras terminarlo y disfrutarlo, me he quedado con ganas de más, así que habrá que tener paciencia a la espera de nuevos números. Da gusto comenzar una nueva serie de comics con esta expectativa.
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