"Stoner" - John Williams

Las referencias sobre esta novela son muchas y todas muy elogiosas. De su autor he leído la magnífica Butcher´s Crossing, pero tenía pendiente desde hace mucho tiempo leer la que dicen es, no solo su mejor novela, sino también una de las cumbres de la literatura norteamericana de la segunda mitad del siglo XX. Su protagonista, William Stoner, es un joven hijo de granjeros que acude a la universidad de Columbia, en Misouri, para estudiar una carrera de agrónomo, antes del comienzo de la Primera Guerra Mundial. Sin embargo su afición por la literatura inglesa, hará que dirija de lleno su vida al estudio de dicha asignatura, ligando su carrera profesional y su existencia, de manera inseparable e irreversible, a la universidad y la sociedad que la habita. 

A lo largo de los años, Stoner se convertirá en profesor de la universidad donde se formó, pasará allí su vida, viendo pasar dos guerras, mientras transcurren los años formándose y educando a sus alumnos en un juego en el que no siempre encuentra su plenitud en la docencia. Es curioso como el autor nos remarca cómo el protagonista disfruta más de su trabajo, de su quehacer diario, cuando decide traspasar la linea demarcada por la cotidianidad y la monotonía del día a día asumido como normal y tradicional por la sociedad que le rodea. Bien es verdad, que a lo largo de sus años y en consonancia con algunas decisiones tomadas, los anhelos personales y profesionales han chocado con su falta de acierto en fases vitales tan lógicas como el matrimonio o sus clases en la universidad. Sin embargo, como decía antes, en ocasiones, no muchas, lo cotidiano deja paso a una rebeldía por lograr sus deseos soñados en el amor y, sobre todo, en su adorada asignatura de literatura inglesa.

Williams aborda la vida de Stoner en un deambular a lo largo de los años por su carrera profesional y en su ofuscada y desacertada vida sentimental. Su narrativa va desarrollándose página tras página en una linea vital engañosamente anodina, pero especialmente atractiva, en base a un gran personaje. Sus anhelos no alcanzados, sus pensamientos desarrollados en su pequeño estudio, su orden diario en su labor de docente, su manera de esquivar lo incómodo de su entorno más cercano, su ocasional ímpetu por defender su posición en la universidad frente al acoso de quienes quieren decidir sobre su vida, y su, a veces sorprendente aceptación de lo inevitable rindiéndose en una lucha, en ocasiones inútil, le convierten en su cotidianidad, en un oscuro héroe y guerrero de causas perdidas, tendentes a convertirlo en un perdedor y solitario personaje. La lectura del ir y venir de la vida del protagonista de la novela deja un sabor de boca amargo. Pero también queda en el lector un destello de luz, como un reflejo de aquellos instantes en los que la existencia de Stoner brilla sobre todo lo demás. En definitiva la literatura inglesa, sus libros y el recuerdo de un amor perdido, afloran como una esperanza en el paso del paciente profesor por aquella sociedad universitaria en la que ocupó toda una vida.