Nadie diría al escuchar "Victim of love" que este es el segundo disco de Bradley. Podríamos llegar a pensar que nos encontramos con uno de esos dinosáurios musicales, supervivientes de una vida musical de muchos años y kilómetros recorridos en la carretera. Sin embargo, con sus 65 años, el cantante acaba de grabar su segundo trabajo. Imitador de James Brown en el pasado, Bradley fue descubierto cuando tenía 63 años, publicando su primer disco en el año 2011.
Su voz, nos acerca al soul más clásico, jugando con un sonido potente y lleno de alma y sentimiento. Su voz cascada y poderosa transmite una música que nos traslada a los años donde el soul campaba a sus anchas por el universo musical. Se acompaña de una variopinta banda que desborda calidad llamada Menahan Street Band. Esta asociación hace del disco un producto muy sólido en el que se ha fusionado perfectamente la catarata vocal del solista con el sonido limpio y lleno de matices de la banda.
Una gozada escucharlos...