"El visitante" - Miniserie

HBO ha estrenado recientemente esta miniserie que adapta el último existo de ventas publicado por Stephen King. Habitualmente huyo de las versiones para televisión y cine de la obra de este novelista del género del terror. Lo último que he visto en esta línea son las dos películas de "It" y la primera temporada de "Castle Rock", dejándome ambas bastante indiferente. Sin embargo el solo hecho de la presencia de HBO y de que su creador sea Richard Price, por cuyas manos también pasó la estupenda miniserie The Night of, hicieron que me lanzara a ver los diez capítulos de "El visitante".

La trama se desarrolla en un pacífico pueblo donde un niño aparece asesinado y descuartizado. Todas las pruebas señalan a un honrado padre de familia y entrenador del equipo del béisbol del colegio. El policía a cargo de la investigación descubre que hay algunos puntos oscuros o dudosos, lo que hace que comience a plantearse la culpabilidad del acusado. Las desgracias persiguen al círculo más cercano de los protagonistas y la aparición de unos vídeos convierten un caso policial aparentemente claro en un auténtico galimatías de difícil explicación. Junto a un amigo detective, un policía del departamento, el abogado del acusado, un jefe de seguridad y una mujer con ciertas virtudes especiales y una metodología poco ortodoxa, el jefe de la investigación emprende una carrera a ciegas, llena de misterio y hechos inexplicables, con tal de resolver el caso.

Como suele ser habitual en las creaciones de Stephen King, el argumento juega con dobles historias, hechos extraordinarios misterios insondables que, por supuesto, al final de la temporada tampoco tendrán una clara explicación. Lo que consigue la serie en prácticamente todos sus capítulos, es servir al espectador, con cuenta gotas, toda la compleja trama que rodea la historia, proponiendo un interesante y bien gestionado uso del suspense. Quizá haya dos capítulos que resultan un tanto aburridos e incluso que puedan parecer de puro relleno, pero en general y sobre todo, si nos referimos a los cuatro o cinco primeros capítulos y a los tres últimos, estamos ante un sugerente y notable producto en el que se fusiona muy bien cierto aire de terror, suspense, misterio y un poco de acción. 

Otro de los atractivos de la serie es que, sin tener ninguna estrella de relumbrón en la plantilla, se reúne una serie de actores y actrices conocidos más que solventes y francamente interesantes. Jason Bateman, Ben Mendelshon, Cynthia Erivo, Julianne Nicholson, Mare Winningham o Bill Camp son algunos titulares de este elenco que además, goza de un protagonismo coral que aporta una solvente conjunción a una serie que hubiera funcionado algo mejor si se hubiera reducido su extensión a ocho capítulos. Eso sí, no esperéis una resolución demasiado esclarecedora, ya conocéis al tío Stephen King.