Una gran batalla está teniendo lugar en el pueblecito de veraneo donde algunos de los alumnos del 2º curso del Kings Dominion pretenden huir de la presión de Shabnam y los suyos. Sin embargo, tal como adelanté en la reseña del anterior tomo, varios frentes abiertos provocarán un auténtico baño de sangre. Por un lado la reaparición de Marcus y María pone en jaque al grupo de amigos. Por otro el clan yakuza, de la familia de Saya, realiza un mortal ataque para hacer desaparecer de la faz de la tierra a la heredera y los suyos. Y por si fuera poco el grandullón y asesino Viktor se presenta en el lugar sediento de sangre. Las traiciones de unos pronto verán la luz, mientras imposibles alianzas obligarán a unos y otros a luchar espalda con espalda. Con todo, las circunstancias no modifican el odio, la venganza y el sin sabor de las irrecuperables bajas sufridas. Todo ello constreñido en un número lleno de violencia, sangre, tiros y sesos esparcidos... es decir, un auténtico campo de batalla del que algunos sobrevivirán, aunque quedarán muchos flecos sin cerrar y resquemores pendientes de solucionar.
Nos enfrentamos a un magnífico número lleno de acción y trepidantes composiciones de sus viñetas, con una increíble nivel gráfico, en el que además, Craig nos ofrece algunas imponentes ilustraciones a toda páginas, realmente increíbles. El apartado del guion de Remender, sin perder un ápice de fuerza, ocupa un plano secundario frente al apabullante torrente de color, acción y violencia ofrecido por Craig. Con todo, el guion se hace un hueco para ofrecer al lector nuevos giros en las tramas, para provocar nuevas visiones de la amistad, la fidelidad y el amor de estos jóvenes descarriados, que solo buscan una manera de escapar de su pasado y del deseo de unos padres y familiares, deseosos de que sigan su camino de delincuencia y terror. Habrá nuevas bajas, pero la vida continuará en una huida hacia quién sabe donde.