Son muchas las series de calidad que en los últimos años han ocupado la oferta de producción proveniente de las Islas Británicas, dentro del género policial. Me remito a algunas como Broadchurch, Bodyguard, la magnífica Line of duty, Trigger point, The responder o La torre. Exceptuando las dos primeras, más específicamente dedicadas a investigación procedimental, las demás ponen su punto de atención en los cuerpos de policía a pie de calle o de investigación interna del departamento en cuestión. En ellas, la corrupción, el tráfico de drogas, los problemas sociales y la interacción de los distintos protagonistas, ya sean mandos o compañeros de servicio, en su medio más personal o privado, sirven de nexo a una trama de fondo y decorado principal que estructura y cimenta a toda la serie o miniserie.
Pues bien, en la misma línea, se acaba de estrenar esta serie irlandesa, de la que ya se ha acordado una segunda entrega, dedicada a los miembros de una comisaría de Belfast en la actualidad. A los indicadores dramáticos que he incluido anteriormente, se une la compleja situación de una Irlanda del Norte ya pacificada, pero de la que se descuelgan complejos problemas sociales, la existencia de grupos criminales herederos de la época del terrorismo y el profundo conflicto endémico en la relación policial con los ciudadanos, especialmente en los tradicionales barrios conflictivos de la ciudad.
Blue Lights reúne lo mejor del género, mostrando un conjunto sólido de actores y actrices, que muestran al espectador el día a día de una comisaría en la que veteranos y novatos se interrelacionan en el complejo universo de las patrullas policiales, en el que chocan su propia manera de entender el oficio policial y la compleja relación con los ciudadanos que siguen viendo a la policía como un instrumento de represión, a pesar de los años transcurridos, tras el cese del terrorismo. Esos mismos grupos de delincuencia organizada se han visto empujados a subsistir en una nueva dirección, entroncando su supervivencia con otro tipo de delitos. Todo ello deambula en el filo de la navaja cuando estructuras superiores al devenir de la comisaría, intervienen en la zona, desequilibrando su labor policial y forzando una situación que afectará a los protagonistas de una serie que merece mucho la pena.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si comentas, aceptas la política de privacidad. Únicamente utilizaré tu correo para los comentarios. No lo almacenaré ni lo usaré para nada más.