El Nº 25 de la sección de Historia Moderna de Desperta Ferro esta dedicado a la Guerra de las Alpujarras. Tan novedoso como emocionante. Desde luego el acierto de la revista al tocar este tema, conocido por todos, pero tan poco tratado fuera de estudios universitarios o artículos sueltos, es evidente. Siempre he oído hablar de esta guerra interna en España entre los años 1568 y 1571, al leer ensayos y libros sobre el periodo del reinado de Felipe II y la figura de Juan de Austria, tratado como un frente incómodo pero secundario, en comparación con los sucedido en Flandes o el Mediterráneo Oriental. Con este número y sus artículos, nos podemos hacer cargo de su importancia y el complejo desarrollo de la guerra. Con decir que se tuvieron que trasladar parte de los Tercios italianos a la península lo digo todo.
Desde luego la situación de los moriscos en el Reino de Granada durante la mitad del siglo XVI, no estuvo exenta de altibajos. Por un lado, en un principio existió un respeto por la religión y costumbre de los nazaríes que decidieron quedarse en el reino tras la caída de Granada. Sin embargo con el tiempo, la presión para que abandonaran su religión y posteriormente, los ataques a sus costumbres y tradiciones, en parte por el miedo de los peninsulares al apoyo y ascendiente de los turcos en el Mediterráneo, hizo que la tensión entre ambos grupos fuera explosiva. En el primer artículo se habla sobre el devenir de la comunidad morisca en el antiguo reino de Granada antes de la guerra, llamando la atención, sobre todo, en la mayoría de esta comunidad en el territorio frente al número de cristianos viejos. El estallido de la revuelta en diciembre de 1568 cogió a muchos desprevenidos y la respuesta llegó desde dos frentes no bien avenidos. Por un lado el Marqués de Mondéjar y por otro el Marqués de Vélez. Los primeros más afines a la negociación y los segundos más radicales y cercanos a la sumisión a sangre y fuego. La historia podría haber ahorrado tres años de guerra si Felipe II no hubiera apoyado a un Vélez, prometedor pero que resultó inoperante en la guerra. Como remarca el artículo titulado Las Operaciones Militares, la guerra se prolongaría en el tiempo por tres causas principales. Primero la orografía del terreno. En segundo lugar las desavenencias entre los mandos españoles y tercero la llegada de ayuda turca a los moriscos. En éste artículo se observa como crece la revuelta en medios, hombres y territorio, convirtiendo el levantamiento en un auténtico peligro en la propia casa de la Corona Española. Finalmente gracias a las disensiones internas entre los jefes moriscos y sobre todo la toma de la costa y sus puertos por la flota española, más la llegada de tropas profesionales con los Tercios españoles, la guerra se decidió por los cristianos.
Los artículos del presente número son tan completos como extensos en las operaciones militares, consecuencias demográficas y sociales, así como intrigantes en la visión de la sombra alargada del turco, siempre atento y no siempre fiel a los rebeldes, en lo que sucedía en la costa de Granada, Almería y Málaga. Muy interesante el artículo dedicado al asalto de Galera y a la organización militar de los moriscos, atendiendo sobre todo a su maniobrable guerra de guerrillas. Pero lo que más me ha llamado la atención es la crudeza y sangría de esta guerra. Dos artículos remarcan el "a sangre y fuego" llevado por ambas partes y sobre todo las consecuencias para el perdedor y el territorio de la contienda, desarrollado en el último capítulo de la guerra, con la expulsión y repoblamiento de las Alpujarras. Referir por último el muy interesante artículo dedicado a la ayuda turca a los moriscos y su influencia. También el Gran Turco dejó a su suerte a los rebelados, por que sus intereses eran otros. Enhorabuena por un impecable número lleno de información y detalles. Entiendo que desde ahora será un referente en el tema, tan jugoso como bien acompañado, como siempre, de espléndidos planos que acercan al lector la complejidad del territorio tanto estratégicamente como geográficamente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si comentas, aceptas la política de privacidad. Únicamente utilizaré tu correo para los comentarios. No lo almacenaré ni lo usaré para nada más.