Tal como se se indica en el interior del libro, en las cuatrocientas páginas de Sangre romana se narra el primer caso de Gordiano el Sabueso, un detective romano creado por su autor, Steven Saylor, que en plena dictadura de Sila, alrededor del año 80 a.C., es encargado de investigar y demostrar la inocencia de Sexto Roscio, acusado de mandar asesinar a su padre en pleno barrio de Subura, en Roma.
De la mano del abogado Cicerón, en los inicios de su carrera, Gordiano deberá utilizar su olfato de sabueso para demostrar la inocencia del supuesto parricida, para evitarle la peor de las muertes. En su investigación husmeará en las cloacas de Roma y en algunas de las casas más nobles de la ciudad, viajará al norte, a tierras de Umbría y realizará más de un interesante interrogatorio, mediante los que escarbará en el oscuro pasado del padre asesinado y en la relación con su hijo. Una historia en la que el patrimonio familiar de los Roscio es la apuesta a ganar, no solo en el entorno ligado por la sangre de padre e hijo, sino también en la compleja corte de seguidores de Sila. La época es sombría y resultará clave en la historia de la Roma Republicana Tardía.
Steven Saylor describe con asombroso detalle los ambientes en los que se mueven los protagonistas de la novela. Desde el ámbito del hogar romano, ya sea en la aristocracia, tanto como en el de la gente más pobre de la ciudad, incluyendo el entorno de las calles por las que se mueven, ya sea en el foro romano o en los callejones recónditos y oscuros de Subura. Todos ellos resultan pincelados de tal manera, que el el lector es capaz de imaginarse con cierta fidelidad, cada uno de los lugares por los que Gordiano y lo demás personajes pasean en su investigación de este caso especialmente peliagudo. Conforme el sabueso investigador avanza en su investigación, se va conformando un caso lleno de recónditos y oscuros detalles que rozan lo escabroso y muestran las posibles desavenencias de quienes, a primera vista, pudieran pasar por inocentes y respetables ciudadanos. Es precisamente en los perfiles dibujados por Saylor, donde el escritor demuestra su capacidad para construir sus personajes, mostrando caracteres y personalidades ricos en detalles y sesgos que permiten al lector localizarlos y focalizarlos en la novela y sus recovecos, conforme son descritos.
Particularmente, nos encontramos con un caso que fue realmente defendido por Cicerón, si bien los detalles de la investigación y algunos de los personajes han salido de la rica inventiva del autor. En base al discurso real que, como abogado defensor de Sexto Roscio el Joven, declamó en el Foro Romano, Steven Saylor ha construido una entretenida novela negra en la que para el lector es fácil sumergirse y dejarse llevar por los pasos que Gordiano va dando en búsqueda de una verdad, a veces esquiva. Es esta la primera novela de una larga saga que a lo largo de los años le ha llevado a ser uno de los detectives más populares en el género mixto de la novela de suspense e histórica. Y desde luego no será la última que lea. tengo en la biblioteca de mi casa la segunda entrega, a la que espero adentrarme no muy tarde.
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