De la mano de Baltasar Kormákur, veterano director islandés, creador de producciones tan interesantes como las películas Everest y Contraband, o la serie Atrapados, estrenó antes del verano, en la plataforma Netflix, su nueva serie. De nuevo nos presenta una producción en donde el perfecto pulso con el que maneja el suspense, se aúna con los paisajes de Islandia y con su exquisito y elegante planteamiento de las historias que surgen en su cabeza.
Un volcán activo en un lugar remoto de Islandia, la extraña aparición de personas desnudas y cubiertas de ceniza y barro en mitad de la nada, una tierra inhóspita bajo la continua lluvia de ceniza y el complejo pasado y presente de los pocos pobladores de Vick, un pueblo semi abandonado ante la actividad del volcán Katla, son algunas de las argumentaciones con las que se presenta esta sorprendente y inquietante producción. Su primer capítulo atrapa el interés del espectador gracias a su ritmo pausado y el suspense servido a cuenta gotas, características que van a más, conforme avanza la serie sin perder ni un ápice de interés a lo largo y ancho de sus ocho capítulos. Su trama juega entre el componente fantástico basado en ciertas tradiciones y leyendas islandesas, y los problemas personales de los protagonistas, derivados de sus vidas pasadas y sus relaciones actuales, en las que quizás, vivan más por dejarse llevar de unas situaciones sobrevenidas, que por lo que ellos hubieran deseado vivir. Esta extraña combinación, resulta en manos de Kormákur, una absorbente y concienzuda conjunción de historias hiladas con puntadas finísimas, con las que logra plasmar en la pantalla, un mágico escenario lleno de dolor, sentimiento y humanidad.
No cabe duda que los impresionantes paisajes, casi desoladores, pero tremendamente bellos, de Islandia, ofrecen un escenario privilegiado para situar este tipo de historias pergeñadas por su creador. Lo que sucede, es que en este caso, Kormákur no solo se ha rodeado de directores islandeses con experiencia en producciones como la serie Baptiste o la menos interesante Los asesinatos de Valhalla, sino que además, y con cierto rango de autoridad, ha imbuido en la serie de la elegancia y exquisitez tan propia de él ya demostrada en la serie Atrapados. Sus personajes supuran dolor, pasión y sentimientos. La soledad, la penitencia o cierto espíritu de pérdida de algunos de los personajes, componen el caldo de cultivo perfecto para ser golpeados por un hecho fantástico e inexplicable, que fracturará sus vidas, dando un nuevo sentido vital a todos ellos. Este es el mensaje, la paradoja, a veces cruel y dura, que nos plantean unos capítulos que avanzan hacia un desenlace sorprendente, en el que el aditamento fantástico pasa a un segundo plano, frente a las experiencias y sentimientos que sufren sus protagonistas.
Quitaos los prejuicios sobre esta producción y adentraros en sus capítulos con la mente abierta y con espíritu de disfrutar de una historia plagada de suspense, sorpresas y, sobre todo, mucha humanidad en todo lo que el concepto incluye de felicidad, recuerdos, dolor, crueldad, pasión y esperanza. A por ella, no lo dudéis.
Has despertado mi curiosidad. La anoto y cuando me sea posible, la veré.
ResponderEliminarA ver qué tal. Ya contarás.
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