"The Marvelous Mrs. Maisel" - Temporadas 1, 2 y 3.

Hace ya tres años, se estrenó esta serie en Amazon Prime Video, pasando totalmente desapercibida para mí. En estas fechas de confinamiento en casa por la crisis del coronavirus, hemos sondeado nuevas propuestas con las que llenar y sobre todo entretener, algunas horas que quedan sueltas entre el teletrabajo y los menesteres obligatorios de casa. De esta manera tan tonta llegamos a las tres temporadas de la serie que hoy reseño y que nos menos tragado de tirón en casa en cuestión de un par de semanas.

Miriam Midge Maisel es una joven judía acomodada, felizmente casada, que vive en debajo del piso de sus padres en una situación de absoluta tranquilidad y bienestar. Su marido está convencido de que su futuro pasa por ser un famoso monologuista, de esos que triunfan en los locales y bares de la zona baja de Nueva York y Midge le apoya en todo lo que hace. Sin embargo la infidelidad de éste y una casualidad sobrevenida en uno de esos locales, terminan por atraer a la joven hacia el mundo del humor y la comedia, hasta el punto de que será ella la que, contra viento y marea, comience a labrarse una carrera en el complejo y machista mundo de los monologuistas cómicos.

A lo largo de las tres temporadas que reseño se desarrolla todo lo que rodea, tanto la vida personal como profesional de la protagonista. El hecho de ser una mujer a finales de los años cincuenta no facilita especialmente la situación. Es en la primera temporada donde Midge lucha por adentrarse en un mundo dominado por los hombres, en los que entre otras cosas, los chistes subidos de tono, forman parte del guion de un monologuista. Sin embargo, su agilidad , talento y capacidad de improvisación la van afianzando en un pequeño club de Nueva York. Mientras, la vida en casa sigue igual, más allá padecer la ruptura de un matrimonio que parecía perfecto. Es en la segunda temporada donde la carrera de Midge comienza a despegar. Su manera de ser y su perspicacia la ayudan a salir airosa en sus visitas a otros clubs, mientras encuentra trabajo en unas grandes almacenes, donde alterna su dedicación en la sección de perfumería o en el cuarto de telefonistas, dependiendo de cómo gestione la relación con sus jefes y la comedia. Mientras, sus padres, que en este temporada adquieren cierto protagonismo, sufren una profunda crisis. El patriarca es un egocéntrico profesor de ciencias en la Universidad de Columbia.  La madre es una impecable y divina señora que, en un momento dado, decide huir a París a librar su propia aventura. Magníficos los capítulos de la segunda temporada ambientados en la capital francesa, donde Midge y su padre intentan que la esposa y madre regrese a Nueva York. La tercera temporada propone el lanzamiento definitivo de nuestra protagonista a la fama. Tras pasar unos días en una zona de vacaciones típicamente judía y donde conoce a un joven cirujano, gracias a su representante, consigue realizar un pequeño show en televisión en donde conoce a un cantante famoso de soul. Éste la invita a realizar una gira por los EEUU y Europa como telonera de su show. Todo parece que va sobre ruedas mientras se enfrenta encarnizadamente a una veterana estrella mediática de la comedia.

The Marvelous Mrs. Maisel es una serie que goza de buenas interpretaciones y un guion ágil, inteligente e un buen puñado de historias humanas. Pero además, yo creo que su punto fuerte es la ambientación de finales de los años cincuenta y principios de los sesenta que nos presenta, tanto a nivel de producción, vestuario o banda sonora. El inicio de cada capítulo son auténticas virguerías de montaje, estilo y buen gusto. Desde luego, Amazon lo ha apostado todo a una serie muy entretenida, donde además de humor y comedia, no se olvidan de afrontar el tratamiento y las circunstancias sociales propias de aquellos años. La desigualdad de la mujer, el machismo, el mundo gay, la diferencia de raza, el humor judío, la situación de una madre soltera y su necesidad de trabajar, el trasfondo de la presencia de los Kennedy o la evolución del humor en aquellos años en los que los shows televisivos y la presencia de los clubs de monólogos y música, centraban el ocio de aquella época. También es verdad que todo está plasmado desde un prisma cómico y en una situación holgada y nada desgraciada de los protagonistas. El toque humorístico es continuo en toda la serie, plena de diálogos inteligentes, toques de comedia y situaciones eso sí, a veces, rocambolescas.

La serie goza de un plantel de actores y actrices notable. La protagonista Rachel Brosnahan, si bien es verdad que en su gesticulación a veces resulta repetitiva e incluso me recuerda un montón a Jack Lemon, funciona en su papel, haciéndolo propio e intransferible. Le acompaña, su marido en la ficción Michael Zegen que funciona bien, y la representante, interpretada por Alex Borstein, modela un personaje que en contraposición con el de Midge, conforma un dueto curioso y divertido. Sin embargo, estoy embelesado con las interpretaciones de los padres de la protagonista. Marin Hinkle y Tony Shalhoub forman una pareja maravillosa en sus diferencias, en su fidelidad y especialmente en su compenetración en la serie. Ambos han ganado en la última entrega de los premios Emmy sendos premios, sumándose a varios premios recibidos por la protagonista y la serie en los anteriores años 2017 y 2018. Y no olvido a un secundario especial. Me refiero a Luke Kirby en su interpretación del humorista Lenny Bruce. Personajazo. Ya hay confirmada una cuarta temporada. Estoy encantado.