Interesante serie de seis capítulos ambientada en Bagdad tras la segunda invasión de los EEUU y la caída del régimen de Sadam Husein. Un ex policía iraquí malvive en una ciudad destruida y gobernada en un débil equilibrio entre grupos armados insurgentes y la débil posición de las fuerzas de la coalición que, desde la Zona Verde, intentan poner orden en el caos de la ciudad. Con un pasado marcado por la muerte de su hijo y esposa, intenta mantener a sus dos hijas, una de las cuales esta enferma y la otra desaparece misteriosamente. Después de un malentendido con las fuerzas de intervención estadounidenses, un oscuro miembro civil de la oficina de ocupación le ficha para trabajar contra la insurgencia, hecho que él aprovecha para investigar la desaparición de su hija y conseguir cuidados para la enferma. A partir de este momento, varios acontecimientos le llevan a investigar unos asesinatos que le conducen hacia oscura una red de prostitución organizada por algunos occidentales. Solo su pericia y ciertos lazos con un capitán de la Policía Militar estadounidense le llevarán a buscar la luz en sus pesquisas por encontrar a su hija y solucionar el caso en el que se encuentra ocupado.
El actor Waleed Zuaiter interpreta de manera notable al inspector y padre, en un juego de tensiones por dar carpetazo a su pasado y salir adelante con sus hijas. La serie nos muestra la situación de una ciudad en la que las venganzas y las luchas de poder de los propios iraquíes, conviven con la compleja y poco fructífera lucha de las tropas de ocupación por dominar a un pueblo cada vez más cercano a la insurgencia y al enfrentamiento con quienes invadieron su país. Aquellos aires de rebeldía contra Sadam Huseín por parte de un sector de la población van quedando olvidados tras la presencia de los EEUU. Sin un órgano de gobierno fuerte y una policía local fiable, la ley y el orden dependen, no solo del ejército estadounidense, sino también de las empresas de seguridad, los mercenarios y los lobbys interesados en sacar provecho de un país en ruinas. Y es aquí donde entra en juego el protagonista, enfrascado en un turbio asunto en el que se encuentra enfangado algún que otro departamento de la Zona Verde. Y con todo, este superviviente solo vive por su familia y por levantar un país que se hunde sin remedio.
La serie goza de una ambientación convincente, localizando un thriller policiaco y de suspense en las ruinas de la Bagdad conquistada. Los grupos beligerantes suman participantes en un juego de poder y corrupción que funciona en pantalla muy bien, teniendo en cuenta las dificultades de supervivencia que ofrece semejante localización y la situación que rodea a la ciudad. Las mentiras, los bulos, las ansias de venganza y de lucrarse en base a un país destrozado y en vías de reconstrucción, forman una base sólida de esta serie de la que parece que debería tener continuación, visto el final de la misma, aunque a estas alturas no hay anunciada segunda temporada. Bien merecería la pena, la verdad.
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