"Antebellum"

 

Estrenada en septiembre de 2020, he tenido ocasión de ver recientemente esta película dirigida por Gerard Bush y Christopher Renz, en la plataforma de televisión Movistar. Su trama afronta el problema que actualmente se presenta en EEUU al respecto del racismo, el supremacismo blanco, la complicada presencia de la gente de color en una sociedad falsamente normalizada y la presunta realidad que subyace en una Norteamérica cada vez más dividida a nivel racial. Formalizada desde un plano de tramas, aparentemente paralelas entre un momento en la actualidad y otro situado en plena guerra de la secesión, Antebellum nos propone una historia cercana al género del terror y suspense, recordando un tanto al modelo que en su momento, nos ofreció el director Jordan Peele en su aclamada y, en mi opinión sobrevalorada, Déjame salir

Poco puedo contar de la película sin caer en la tentación de realizar algún spoiler y destrozaros la trama de la misma. Solo comentaré algunos rasgos de sus protagonistas. Pero antes, insisto en el marcado trasfondo que pretende mostrar al espectador, con el firme deseo de analizar la realidad actual de un racismo, muchas veces soterrado o de baja intensidad, que en el fondo es reflejo y herencia de la cultura histórica de los EEUU que todavía no ha superado sus rescoldos y pasado no tan lejano. Su protagonista esta encarnada por la actriz y cantante Janelle Monáe. La actriz interpreta a una activista de color con cierto éxito que propone luchar y enfrentarse a la triple tiranía del racismo, el machismo y la diferencia social que ella ve evidente en los EEUU. Paralelamente, antes de presentar esta trama principal, el director nos ha mostrado a esta misma actriz, encarnando a un personaje enfrentado a la esclavitud en plena Guerra de la Secesión y confinado en un campo de algodón vigilado por un batallón del ejército confederado. Mientras la protagonista, en un mundo actual, sufre destalles de racismo e intolerancia de bajo perfil pero claramente desveladas en su relación con determinadas personas, la mujer del campo de algodón, sufre en sus carnes las torturas y la violencia que le imprimen sus amos blancos. Poco a poco esas dos tramas irán cruzándose en un expectante y sorpresivo recorrido alrededor de sus momentos vitales.

Nos enfrentarnos a una película de claro perfil crítico, casi extremo en su relación entre el presente y el pasado, que se encamina con descaro  hacia el universo del género de terror. Por lo demás, no puedo dejar pasar la ocasión de celebrar y llamar la atención en el buen hacer de los directores en lo que respecta al uso de la cámara, la fotografía y el montaje del film. Especialmente llamativo, por su buena ejecución, es la propuesta de la primera escena del film, realizada en un plano secuencia impresionante. Estamos ante un producto con un nivel técnico interesante y un plantel de actores y actrices que, sin resaltar especialmente, cumplen su papel. Desde luego, lo que no se puede negar es que el efecto sorpresa planteado por la película, funciona, más allá de los excesos puntuales de un producto que juega en el filo de la navaja dramático y argumental, al navegar entre el género del terror y la crítica social nuestro mundo actual analizado desde el punto de vista de los directores.