No me considero un convulsivo coleccionista y lector de las historias de los super héroes de Marvel o DC que tanto abundan en el mercado. Sinceramente intento seleccionar puntualmente los que me parecen más interesantes, ya sea por la calidad del guion o del dibujo. Sobre Batman se ha publicado mucho. No habrá un guionista o dibujante que no haya colaborado o participado en la elaboración de algunos de las miles de publicaciones que podemos encontrar en las tiendas especializadas. Sin embargo un par de guionistas e ilustradores están por encima de todos los demás.
Me refiero al gran Frank Miller, que en los años 80 redefinió y maduró la figura de Batman mediante dos obras indispensables: Batman: Año uno y Batman: El regreso del Caballero Oscuro. Y también, no olvidar las historias creadas por Jeph Loeb en Largo Hallowen y Dark Victory. Por otro lado y en referencia al dibujo desarrollado sobre el personaje, dos han sido en los últimos años, los artistas que han elevado a arte la manera de plasmar en papel las historias del defensor de Gotham. Por un lado Tim Sale, colaborador de Jeph Loeb en la plasmación de sendas maravillas y por otro Jim Lee, que junto al mismo Loeb creó no hace muchos años Silencio, cuyo dibujo maravilló a propios y extraños con su grandiosa utilización de movimiento. Si reseño el tomo Batman: All Star, se debe básicamente a la participación de dos de estos creadores y a que un blog amigo (Books y Music) me lo recomendó hace un tiempo.
A mediados de la primera década del 2000, Frank Miller y Jim Lee, plantearon juntarse para crear alrededor de Batman una historia con la que redefinir el personaje de su inseparable compañero Robin. Imaginaros la expectación que creó en su momento la unión de estos dos monstruos en la creación de la historia presentada en esta reseña. Y precisamente lo que pretenden los autores es mostrar al público como un Batman del perfil de Frank Miller, duro, violento, solitario y que se encuentra por encima de la ley, que pretende mostrar el camino de la redención a un chaval de doce años a quien han asesinado a sus padres, de la misma manera que lo sufrió el propio Batman en su niñez.
Para ello, Miller, como es habitual, no se corta un ápice en mostrarnos en su guión la dureza y violencia engendrada por un Batman justiciero, que reniega de la policía de Gotham y que se toma la justicia por su cuenta. Para ello intenta equilibrar esta tetosterona irrefrenable con la inocencia de un crío, eso sí, superdotado en agilidad, pero que esta sufriendo en su mente un golpe mortal tras la pérdida de sus padres. He aquí la categoría de un guión equilibrado, muy rápido, pero lleno de claro oscuros y filos de navaja. Y que mejor, para llevar al papel esta historia, que los lápices de Jim Lee, un dibujante de trazo seguro que domina el movimiento y la grandilocuencia que un oscuro y casi aterrador Batman. Este cómic se llena de cuadros con movimientos casi imposibles, de figuras en primer plano que dominan toda la página y que están llenas de detalles y colorido, en definitiva un trabajo apabullante.
Algún comentario más, para describir este cómic. En primer lugar, la aparición por una parte, de los componentes femeninos, plasmados en las figuras de Canario Negro y la hija de James Gordon, que intentan imitar a un Batman justiciero Gotham, una ciudad necesitada de limpieza. Además las cortas apariciones de Cat Woman y Joker, plasman una trama en la que Robin será el principal protagonista. Y por otro lado, se cuenta lo que podría ser la primera reunión de un grupo que en el futuro llegará a pisar fuerte en la mitología creada por DC: la LJA, en la que Supermán, Wonder Woman y Green Lantern, se plantean que hacer con la figura ingobernable de Batman.
Pero no todo podía ser perfecto. Por desgracia, la obra se encuentra inacabada desde el año 2008, debido a los diferentes compromisos de Jim Lee, por lo que la trama de misterio sobre el por qué del origen del personaje de Robin no tiene conclusión en esta colección de diez números. Y esto sí que no lo entiendo. Parece mentira que los cambios en los grupos creativos de DC dejen a los aficionados con una obra de esta entidad sin terminar. Parece que hay un compromiso de hacerlo a corto plazo, pero los plazos en el mundo del cómic son inescrutables... Esperemos que el proyecto se culmine pronto, porque muchos lo estamos esperando.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si comentas, aceptas la política de privacidad. Únicamente utilizaré tu correo para los comentarios. No lo almacenaré ni lo usaré para nada más.